Por : Elena Stambulsky
Diariamente, en el quirófano, como instrumentador quirúrgico , escucho diminutivos de nombres de procedimientos, siglas y diagnósticos cada vez más abreviados. ¿Qué nos está sucediendo?.
Importancia de la Comunicación Efectiva en el Quirófano
La tecnología parece estar apagando nuestra capacidad de comunicación efectiva en quirófano . Nos escondemos tras las pantallas, dejamos de mirarnos a los ojos y, en ocasiones, ni siquiera sabemos a quién o qué estamos solicitando a nuestros colegas. Considero que es imperativo modificar, gradualmente, nuestra manera de comunicarnos. Debemos tener en cuenta que la falta de comunicación efectiva o una comunicación ineficiente acarrean problemas tanto para el equipo quirúrgico como para la seguridad del paciente en quirófano .
En el entorno de un quirófano, donde la precisión y la atención son cruciales, la comunicación emerge como el pilar fundamental que sostiene el bienestar del paciente y el desempeño eficiente del equipo interprofesional.
La interacción entre médicos e instrumentadores quirúrgicos y demás personal involucrado no solo es esencial, sino que resulta determinante para garantizar la seguridad y el éxito de cada procedimiento. La coordinación precisa y la comprensión compartida de roles, protocolos y necesidades del paciente dependen directamente de una comunicación clara y efectiva.
La transmisión de información precisa y oportuna evita malentendidos, redundancias y, lo que es aún más crítico, errores que podrían poner en riesgo la seguridad del paciente .
El Papel del Equipo Quirúrgico en la Seguridad del Paciente
Cada miembro del equipo tiene un papel específico, pero es la comunicación eficiente y fluida la que une estas piezas en un esfuerzo colaborativo.
La capacidad de escuchar, expresarse con claridad y comprender las necesidades individuales son habilidades indispensables en este contexto. Desde la preparación previa a la cirugía hasta el monitoreo postoperatorio, la comunicación efectiva en el quirófano promueve una sinergia que minimiza riesgos, optimiza recursos y garantiza la mejor atención posible.
Abundan los casos de profesionales repitiendo las mismas preguntas, verificando lo ya verificado, y asumiendo que el paciente comprende automáticamente lo que le estamos transmitiendo. Lamentablemente, no siempre es así. En ocasiones, lo que decimos no se traduce en lo que el paciente entiende.
Es esencial prestar suma atención a nuestra forma de dirigirnos y a cómo nos comunicamos, sin dar por sentado que el otro ha escuchado, pues esto puede desencadenar malentendidos.
En quirófano, no hay cabida para excusas ni culpables; todos debemos ser responsables, ya que la vida de una persona está en juego.
Cuando me pidieron escribir este artículo, reflexioné sobre este tema. Desde el título hasta cada párrafo, intento abordar la perspectiva del instrumentador quirúrgico. En mis lecturas e investigaciones, descubrí que la falta de información fiable hace que los errores sean cada día más costosos, no sólo en términos de vidas, sino también en recursos y relaciones personales.
Nuestra comunidad está llena de individuos desmotivados, así como de aquellos que dan lo mejor de sí y no siempre son debidamente reconocidos. Generalmente, quienes critican no están a la altura de aquellos a quienes critican.
Es momento de construir un futuro sin miedo ni maltrato, donde ganemos confianza para comunicarnos, ayudarnos y comprender que no debe haber fracturas. El trabajo en equipo es esencial, especialmente cuando se trata de vidas en juego.
[…] Imagina que eres un médico y te encuentras en una situación en la que debes diagnosticar y tratar a un paciente con una enfermedad desconocida. Tu capacidad para comunicarte y establecer una buena relación con el paciente es fundamental para lograr un diagnóstico y tratamiento adecuado. Pero, ¿cómo se puede evaluar la habilidad de un médico para comunicarse con un paciente de manera efectiva? […]