Por Tamara Carrasco – Aprendizaje Simulado
En el dinámico y exigente campo de la atención sanitaria, la simulación clínica se consolidó como una herramienta esencial para la formación de futuros profesionales de la salud.
A lo largo de este artículo, exploraremos cómo este método proporciona un entorno de aprendizaje seguro en el que los estudiantes pueden mejorar y practicar sus habilidades clínicas. Desde la toma de decisiones hasta el trabajo en equipo, la comunicación eficiente y el liderazgo, la simulación clínica aborda todos estos aspectos cruciales. Todos componentes fundamentales para preparar a los estudiantes para enfrentar situaciones clínicas reales, asegurando una atención de calidad en el futuro.
A continuación, analizaremos en detalle cómo se implementa la simulación clínica y los beneficios que ofrece en el proceso educativo de los profesionales de la salud.
El Rol del Pre-briefing en la Simulación Clínica
La simulación clínica es una estrategia activa del aprendizaje que a través del pre-briefing establece el contexto del problema preparando a los estudiantes para la situación clínica que se enfrentaran.
Ya inmersos en el ambiente clínico simulado pueden resolver problemas clínicos, practicar procedimientos, tomar decisiones, trabajar en equipo para manejar situaciones. La simulación clínica entrega una muestra de la realidad laboral y profesional sin riesgo o consecuencias para los pacientes.
Esta forma de aprendizaje permite que los estudiantes trabajen de manera activa y participativa creando su propio conocimiento o proceso de aprendizaje “realizando un aprendizaje cooperativo entre los participantes”. Con ello pueden enfrentar situaciones reales disminuyendo el error, sintiéndose más seguros en el entorno clínico real y por supuesto, sumándose a la seguridad del paciente.
Aprendizaje Activo y Participativo en la Simulación Clínica
El enfoque de aprendizaje basado en simulación permite a los estudiantes adquirir un conjunto completo de saberes. Este método facilita la tridimensionalidad de los contenidos, que incluye aspectos procedimentales, conceptuales y actitudinales.
La simulación clínica sitúa a los estudiantes en situaciones reales donde deben aplicar todos estos conocimientos. Esta práctica no solo mejora sus habilidades técnicas, sino también sus capacidades de pensamiento crítico y resolución de problemas.
Según Roy, D. (2017), es crucial animar a los estudiantes a pensar como profesionales desde el inicio de sus carreras. La simulación clínica proporciona un entorno ideal para que los estudiantes adopten esta mentalidad profesional temprana.
Aprovechando al máximo la experiencia de simulación clínica, los estudiantes pueden desarrollar una comprensión más profunda de sus futuras responsabilidades. Esta preparación temprana es esencial para su éxito en el entorno clínico real.
Retroalimentación y Debriefing Constructivo en la Simulación Clínica
Al finalizar la simulación, los docentes pueden identificar las debilidades y fortalezas de los estudiantes. Proporcionar una retroalimentación o realizar un debriefing constructivo, inmediato y personalizado es fundamental en este proceso.
Esta retroalimentación ayuda a los estudiantes a alcanzar la auto-reflexión y su máximo potencial. Mediante la reflexión y el debriefing, los estudiantes pueden construir su conocimiento de manera efectiva.
La evaluación detallada y personalizada permite que los estudiantes comprendan mejor sus fortalezas, así como sus areas de mejoras. Este ciclo de aprendizaje y reflexión asegura que estén mejor preparados para enfrentar los desafíos del entorno clínico real.
Las simulaciones clínicas aumentan la confianza de los estudiantes a medida que adquieren nuevas habilidades y conocimientos. Con cada simulación, los estudiantes se vuelven más seguros y competentes en sus habilidades clínicas.
Esta mejora continua en la competencia clínica es crucial para preparar a los estudiantes para situaciones reales. La simulación proporciona un entorno seguro donde pueden aprender y cometer errores sin riesgo para los pacientes.
Beneficios de la Simulación Clínica en la Formación de Profesionales de la Salud
La simulación clínica es una gran estrategia de enseñanza y aprendizaje, tanto para docentes y estudiantes en la formación de los profesionales de la salud.
Al proporcionar una experiencia práctica y segura, permite a los estudiantes desarrollar y perfeccionar sus habilidades y competencias, preparándolos para enfrentar desafíos del entorno clínico real. La capacidad de simular situaciones clínicas complejas y recibir retroalimentación inmediata transforma el aprendizaje en un proceso activo y significativo.
Es fundamental incorporar la simulación clínica en los procesos de aprendizaje y formación de profesionales de la salud desde el primer año de estudios. Este enfoque innovador ofrece todos los ingredientes necesarios para garantizar una formación de alta calidad, preparando a los futuros profesionales de salud de manera integral y efectiva.
Para concluir, es crucial preguntarnos: ¿Cómo podemos seguir mejorando la implementación de la simulación clínica en los programas educativos para asegurar que los futuros profesionales de la salud estén completamente preparados para los desafíos del entorno clínico real?
Reflexionar sobre esta cuestión nos invita a considerar el futuro de la educación médica y las innumerables oportunidades que existen para seguir elevando la calidad de la formación de nuestros futuros profesionales de la salud. Al buscar continuamente nuevas formas de integrar y mejorar la simulación clínica, podemos garantizar que los estudiantes no solo adquieran conocimientos técnicos, sino que también desarrollen la confianza y la competencia necesarias para brindar una atención de calidad en un entorno real.
Que interesante información.
Como estudiante del área de la salud es una gran herramienta la simulación clínica y el uso de tecnologías que esten al servicio del aprendizaje.
Acuerdo totalmente con las apreciaciones de la autora! 👏👏